Aprender a Estudiar: Leer, Comprender, Recordar, Exponer

Cursos grupales + enseñanza personalizada individual.
Para alumnos de Ciencias Sociales y Ciencias Biológicas
A cargo del Dr. Juan Carlos Paradiso

Se ofrecen diversas formas de enseñanza:

1) Recursos generales para la enseñanza en el aula (para docentes):
Metodologías de taller, grupos operativos, Técnicas de estudio, comprensión de textos, recursos mnemotécnicos, Lectura Veloz

2) Recursos de aprendizaje para alumnos de nivel secundario o universitario

3) Acompañamiento para el aprendizaje de textos específicos para exámenes de ingreso o finales.

Disertación en Congreso

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Salud en el Municipio

Clase en Universidad de Salamanca

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Curso: Profesorado en Educación, Salamanca, España

viernes, 14 de agosto de 2009

¿Qué es la memoria?

SISTEMAS DE MEMORIA

¿Qué es la memoria?

Considerada en un sentido amplio, la palabra "memoria" denota la cualidad de cualquier sistema de registrar, almacenar, y en un momento dado reproducir, una determinada información. Es así que existe memoria en la forma en que los hijos se parecen a los padres (porque genéticamente se reproducen obedeciendo a un modelo), en la forma en que nuestro sistema inmunológico nos defiende frente a una infección que ya habíamos padecido (a la cual reconoce y ataca más fácilmente), en la forma en que una sociedad de abejas construye su panal (respondiendo a un código que se transmite por herencia), en una computadora, en la forma en que recordamos hechos del pasado, etc.

Dejando de lado, momentáneamente, a todas las otras interesantes clases de memorias, en este trabajo nos limitaremos a considerar aquella que es propia del cerebro de los animales superiores y del hombre. La memoria cerebral no se transmite hereditariamente, sino que es una capacidad potencial, un pizarrón en blanco que será ocupado por los hechos de la experiencia individual. Es decir, la información grabada en esta memoria dependerá del aprendizaje del individuo. Esta memoria – que ya aparece en los primeros mamíferos hace más de cien millones de años – va adquiriendo mayor relevancia acompañando la paulatina evolución hacia las especies superiores, y adquiere su máxima expresión en el humano. La preponderancia del aprendizaje como fuente de datos (y como guía para la conducta) tiene algunas consecuencias interesantes. Por un lado hace al humano un ser indefenso durante los largos años que dura este aprendizaje, pero por otra parte es lo que lo deja convertir en el ser vivo con mayor capacidad de adaptación a diferentes condiciones ambientales, no dependiendo tanto de sus instintos (útiles pero rígidos) como de su capacidad de obrar de acuerdo a los datos de la realidad, y aún de modificar esa realidad para adaptarla a su propio criterio.

Así entendida la memoria, ésta es una base de datos almacenados y disponibles para ser utilizados por el individuo, que actuará de acuerdo a la situación presente pero con base en la experiencia o conocimientos anteriores. Pero, es esta memoria una sola entidad?

Las investigaciones actuales conducen a sostener que existen, por lo menos, tres sistemas de memoria: el almacén de información sensorial (AIS), la memoria a corto plazo (MCP) y la memoria a largo plazo (MLP). Cada uno de estos sistemas sirve a diferentes propósitos y parece responder a mecanismos distintos.

El AIS es lo que permite retener por brevísimo instante un material o acontecimiento presentado a los sentidos, como serían los obstáculos que se encuentran al caminar, los ruidos que ocurrieron cerca nuestro, o el color de las paredes de la habitación por la cual acabamos de pasar. Si esta información no es significativa para el individuo, desaparece rápidamente de la conciencia. Esta memoria es sumamente útil para el manejo cotidiano, y el olvido instantáneo es un mecanismo de defensa para no abrumarse con cantidad de datos que no serían útiles pasado el momento del estímulo. Jorge L. Borges ofrece un buen ejemplo de lo que sucedería si alguien no pudiera olvidar esta información trivial, en su cuento "Funes el memorioso".

La MCP es diferente. Esta es la que pone en juego el mozo de un bar a quien un grupo de parroquianos le solicita diferentes bebidas o comidas, y aquél, haciendo gala de una excelente memoria, traslada su pedido al mostrador, y vuelve con el mismo cumplimentado. En este sistema se inscribe la información que el sujeto elige como significativa para recordar, y permanece en él el tiempo en que el sujeto mantenga concentrada su atención. Dejada a su suerte, esta información se esfuma en menos de medio minuto (quienes la han medido así lo aseguran). Por lo tanto, la condición para la permanencia de una información en la MCP es que el individuo no se distraiga, no piense en otra cosa, porque toda nueva información que se intente incorporar producir algún grado de interferencia con la anterior.

Así entendida, la MCP depende mucho de la atención selectiva, de la voluntad, de la conciencia. En los últimos años, hay una tendencia a considerar la MCP como parte de un sistema más complejo, llamado Memoria de Trabajo (MT) que incluye el almacenamiento (MCP propiamente dicha) y una unidad central de control que sería consciente y que dependería de la voluntad de esa persona. Para nuestro caso, bastará conocer que MT es una nueva manera de considerar a la MCP y podremos usarlos como sinónimos, aunque estemos incurriendo en una pequeña inexactitud.

La MLP es el sistema que nos permite registrar la información prácticamente en forma definitiva. En ella se inscriben los hechos perdurables, los datos importantes no sólo para el presente sino también para el futuro. Es una marca definitiva, algo que no podrá ser borrado. A esta inscripción se la denomina "engrama". Lo que hace interesante a este sistema es que parece que la información se acompaña de formación de nueva materia, es decir que el cerebro sufre ciertos cambios orgánicos (formación de nuevas estructuras) sobre los cuales se ha especulado mucho. Hay quien pretende haber detectado sustancias específicas que se harían cargo de una determinada información, y la ciencia-ficción recoge relatos de inyecciones para producir determinados aprendizajes.

En este campo tan vasto e interesante, omitimos por ahora ciertas consideraciones teóricas que complican un poco el modelo que hemos descrito. Por ejemplo, el valor de la transmisión hereditaria en la determinación de lo que se puede aprender, la difundida teoría de Jung acerca de un inconciente colectivo (es una forma de memoria), la misma idea de Freud acerca del olvido como mecanismo de defensa, etc.

Retomaremos el tema posteriormente, con el propósito de exponer no sólo aspectos teóricos, sino también prácticos, acerca del mejor manejo de esta cualidad en diferentes situaciones, especialmente en el aprendizaje.

Si quieres tener una idea gráfica de cómo funcionan estos sistemas, te pedimos que vayas al archivo: “ sistemas de memoria.ppt ”, puedes jugar con la animación en Power Point

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1 comentario:

  1. Hola. Hace unos años me contaba uno de mis hijos que un profesor (de la escuela técnica) había sufrido un problema de salud que afectó su memoria. Por lo que escribís sería la de corto plazo porque este señor no recordaba a qué fórmula había llegado la clase anterior. Pero, una vez que era escrita en el pizarrón por un alumno, él comenzaba los razonamientos necesarios para llegar a nuevas fórmulas (en Física)que "no sabía de memoria". Esta desventaja dio paso a una excelente estrategia metodológica, ya que sus alumnos afirmaban que habían aprendido a razonar con mucha "plasticidad", facilidad. En definitiva, no tenían que aprender las fórmulas de memoria, ya que razonando llegaban a elas.

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